En este caso se trata de Vindius: El guerrero del norte. Una historia enmarcada en el género de espada y brujería en la que su autor, Luis Guillermo del Corral, ha puesto toda la pasión del mundo y todo su conocimiento (que os aseguro que es amplísimo) del género al servicio de una historia de fantasía que tiene el aliciente de no transcurrir en lugares lejanos ni en mundos fantásticos. La historia de Vindius acaece en nuestra querida piel de toro, y sí, su protagonista es "el guerrero del norte"... pero del norte de España.
Esta es la descripción de la novela que da la editorial:
"La Segunda guerra Púnica ha acabado hace menos de 10 años. El Imperio ha perdido todas sus posesiones no africanas. Aunque pocos son conscientes de ello, la Republica de Roma ha comenzado los primeros pasos hacia su era dorada. Pero no todo es paz. Mantener la posesión de un terreno conquistado no es fácil. Siempre hay gente que tratará de librarse del conquistador derramando aun más sangre.
En persecución de un criminal cartaginés, un grupo de jinetes de la legión asentada en las cercanías de Tarraco, llegará hasta las montañas de la costa cantábrica. Allí conocerán a un guerrero de sus bárbaros pueblos que será su guía a través de tierras para ellos salvajes y desconocidas.
Vindius les indicará el camino a través de su agreste tierra natal. Un mundo de sangre, acero y brujería. Habitado por criaturas terribles y fascinantes. Hechos que hoy en día son mera leyenda, pero que en aquella época eran tenebrosa realidad. Entre la muerte y el olvido de los caídos tan solo se interpone el hacha de Vindius el Cántabro, el indómito guerrero del norte.
Dicen los sabios de la Antigua Atlantis "por cada Héroe hay una Era, y por cada Era, un Héroe". Y dicen la verdad..."
La idea de la portada era que tuviera el aspecto de un número de "La Espada Salvaje de Conan", ya que la historia de la novela era de espada y brujería y su protagonista un bárbaro. En cuanto a la composición de la misma, fue idea de mi editor la idea hacer que la acción se desarrollara en varios planos, con el protagonista y su enemigo enzarzados en una lucha en segundo plano. Es algo que creo que a mí no se me habría ocurrido hacer y al final quedó bastante bien (gracias Pako).
Para diferenciar los planos utilicé diferentes iluminaciones, empleando colores más vivos para la escena donde se desarrollaba el combate y un tono azulado para el centurión que está de espaldas a punto de entrar en acción.
Os dejo con la portada con y sin títulos:
Portada maquetada por Néstor Allende.
Si os interesa el libro podéis conseguirlo aquí:
La imagen a más resolución aquí:
No hay comentarios:
Publicar un comentario